La mejor iluminación para el cultivo de cannabis

marzo 9, 2020 12:49 pm

En invierno, casi todos los cultivadores tienen en marcha sus armarios o salas de cultivo para llenar las despensas de cogollos. Sobre todo, hasta que llega el calor y comienza la temporada de exterior. Por ello, hoy queremos daros algunos consejos sobre la iluminación en el cultivo indoor. Para que sepáis usar la mejor iluminación para el cultivo. Bienvenidos al TOP CULTIVO, consultorio cannábico de Marihuana Televisión.

¿Qué luz me recomiendas para crecimiento?

En el cultivo de marihuana en interior es recomendable tener una luz diferente tanto en crecimiento como para la floración. En ambas fases, la planta necesitará una potencia y un espectro diferente.

Lo primero que tienes que tener claro, es que las plantas en sus diferentes fases del ciclo de cultivo requieren de una potencia y un espectro concreto para poder desarrollarse en plenitud. Durante las horas de luz, la planta realiza la fotosíntesis. Es en este proceso a través de la clorofila, donde la planta absorbe la luz y transforma la energía para el desarrollo de la planta. Dado que en esta fase las plantas son muy pequeñas, es conveniente no utilizar ni una potencia, ni un espectro lumínico que sea agresivo para la planta.

Por ello, para tener la mejor iluminación para el cultivo en crecimiento necesitaremos de una luz de baja/media potencia que no altere las condiciones de temperatura y humedad y que tenga un espectro azul.

¿Qué es el espectro de la luz?

Cuando se habla del espectro de la luz podríamos explicarlo como el color de la luz captada por nuestro ojo. Algunas luces son más azuladas o frías y otras más rojizas o cálidas. Las luces azuladas, rondan entre 5.000 y 6.500 K y son indicadas para el período de crecimiento en indoor, mientras que para la floración, es conveniente el espectro de 2.000 a 4.000 K, de color rojizo.

La mejor iluminación para el cultivo en crecimiento

Por ello, los cultivadores más experimentados apuestan por tubos fluorescentes o bombillas CFL de luz azul para la primera fase vegetativa, que comprende las primeras semanas desde la germinación o desde el esquejado hasta el enraizamiento. La baja potencia requerida durante estas semanas, su bajo consumo y el poco calor que emiten las hacen ideales para que se desarrollen en sus primeros estadios.

Posteriormente, una vez ya se han convertido en pequeñas plántulas, para su crecimiento, cambian a luces con el mismo espectro azul pero mayor potencia, como las bombillas de Halogenuro Metálico, luces LEC, Mixtas de Sodio o paneles LED con el objetivo de que la planta crezca de forma vigorosa y robusta.

Los más extendidos para el crecimiento, tal vez sean el Halogenuro metálico o las bombillas mixtas de sodio, pero cada vez hay más cultivadores que se animan por los LECs e incluso por los paneles LED debido a sus buenos resultados y al ahorro en su gasto energético. Recuerda que la potencia que pongas, dependerá de la cantidad de plantas que quieras abarcar o de la cantidad de cosecha que quieras tener, dependiendo exclusivamente de tus necesidades y la inversión que estés dispuesto a hacer.

La mejor iluminación para el cultivo en floración

Actualmente, tienes múltiples opciones para aportar luz a tu cultivo en floración, todo dependerá en la inversión que quieras hacer y las ganas que le pongas. Cuando llegamos a la floración, las plantas necesitan la máxima potencia de luz que le puedas aportar con un espectro rojo o cálido. Esto se debe a que, por el momento, es la mejor forma de imitar el ángulo del sol de final de verano/comienzos de otoño, donde las plantas per se, llegan a su punto álgido de la fotosíntesis para asegurarse una vigorosa e ingente producción de flores.

Una vez sabemos el espectro a utilizar, necesitaremos saber qué tipo de luz y potencia debes usar en tu interior, dependiendo exclusivamente de la inversión y las necesidades de producción que tengas y requieras. Las más utilizadas son las siguientes.

Sodio a alta presión o HPS

Hasta ahora, las más extendidas en las salas de floración. Podemos encontrar bombillas HPS mixtas (dual spectrum), usadas tanto en crecimiento como en floración, o específicas para esta última fase. Su principal problema es el calor que desprenden, sobre todo en verano. Sus virtudes, es que dispones de bombillas HPS de múltiples potencias, y no soy excesivamente caras.

Lámparas CMH o LEC

Lámparas CMH (Halogenuro Metálico Cerámico) o LEC (light emitting ceramic). Poseen un espectro más amplio que las anteriores, que abarca desde el infrarrojo hasta el ultravioleta, produciendo más terpenos y tricomas que con otras lámparas. Su rendimiento por kW es mayor que el de las HPS.

Luces LED (Light Emitting Diode)

Los LEDs son cada vez más usadas por los autocultivadores de todo el mundo, gracias a sus prestaciones y al ahorro energético que suponen. Su bajo consumo y la ínfima producción de calor, hacen que poco a poco, vaya incorporándose en mayor medida en los cultivos. Además, todas las marcas de este tipo de luz, han creado su gama full spectrum. Con ella, imitan casi de forma perfecta la luz del sol. Su principal problema, de momento, puede ser su precio, pero están bajando y son de una mayor calidad.

Existen otros tipos, como las ultravioletas o las lámparas de plasma, pero requieren de un mayor conocimiento a la hora de aventurarse en su uso. Escojas la que escojas, te aseguramos que podrás sacar unas flores de calidad, siempre y cuando sepas como cuidar tus plantas, utilizando las herramientas que puedas poner a tu disposición.

¿Qué variedad me recomiendas con THC y CBD?

Si buscas una variedad de marihuana con porcentajes elevados de THC y CBD, te recomendamos encarecidamente que pruebes la Morpheus de nuestros colegas de Buddha Seeds.

Morpheus es un híbrido de predominancia índica con propiedades terapéuticas relajantes y calmantes, gracias a su alto contenido en CBD. Buddha Seeds ha trabajado concienzudamente para estabilizar los ratios de THC y CBD en una proporción 1:1 superior al 20% de cannabinoides totales. Es la solución para el consumidor contemporáneo que pretende obtener importantes producciones junto a elevados porcentajes de THC y CBD.

En cultivo, Morpheus destaca por su estructura ramificada, con un potente crecimiento, sin alcanzar tamaños desproporcionados. Culmina en una floración muy resinosa perfecta para los amantes de las extracciones terapéuticas.

A simple vista podrás ver, en la recta final del cultivo, los numerosos tricomas que le dan ese aspecto tan deseado que sumado a sus sabores cítricos con matices terrosos e inciensados, hacen de esta variedad una delicia para los más exigentes. Así que ya sabes, si quieres probar esta fantástica Morpheus entra en la web de Buddha Seeds y hazte con ellas.

Y hasta aquí ha llegado el TOP CULTIVO de hoy. Esperamos que os haya sido útiles estos consejos y desde ahora, sepáis un poco más sobre la planta que tanto nos gusta. Recordad. Si tenéis dudas ya sabéis que nos las podéis hacer llegar a través de nuestras redes sociales. ¡Salud y buenos humos!